CABA | Cadetes de GNA, bajo el lema “Regalemos sonrisas” celebraron el día del niño en el Comedor Los Pilotenes, fue ayer domingo junto a dos mil niños (la mayoría) y adultos, en el barrio Los Piletones, Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).  Un centenar de cadetes pertenecientes a tercero y segundo año de la Escuela de Gendarmería Nacional Argentina, Don Martín Miguel de Güemes desarrollaron el proyecto que lleva el nombre Regalemos sonrisas, iniciaban su actividad a las 7:30 horas de ayer, luego de asistir a la Santa Misa, celebrada por el Capellán Castrense, Padre Ricardo Javier González, quien los acompañó en forma permanente, donde pusieron el proyecto en las manos de Dios, se trasladaron hasta el Comedor, Los Piletones.

Ya presentes en el comedor, fundado por Margarita Barrientos y actualmente dirigido por su hija del corazón Maryam, los cadetes se sumaron a los colaboradores de la obra Los Piletones. Allí, ayudaron a cocinar, pizzas, empanadas, choripanes, hamburguesas, jugo y el tradicional chocolate con lo que se inició a modo de desayuno; mientras otro grupo participaban en el desarrollo de actividades recreativas junto a los niños.

Los pequeños disfrutaron de la presencia de Payasos, que repartían cotillón, reparto de golosinas entre los homenajeados entre los homenajeados, animando con espectáculos musicales, hasta que el momento más esperado se dio, el broche estelar, la presencia de la Banda de Música de la Escuela de GNA, Don Martín Miguel de Güemes. Mientras la tarde avanzaba, la atmosfera de alegría y felicidad de los niños colmaba los corazones de todos, llegaba la hora de los regalos, fueron dos horas más de sorpresas para los pequeños quienes recibieron una gran cantidad de presentes en su día.

Entre el asombro y emoción de los niños al recibir sus regalos, el pensamiento y reflexión fue unánime para los cadetes, así lo describían a nuestra redacción, “si bien el proyecto lleva el  nombre  ‹Regalemos Sonrisas›,  la realidad es otra y mucho más poderosa, es que las sonrisas más grande la traemos nosotros, con el placer y satisfacción de la tarea cumplida. Los niños nos imprimieron su  felicidad en nuestros corazones, en cada gesto suyo y también de agradecimiento. Enseñanza especial además en el ejemplo del servicio y la generosidad de la gente que colabora con la obra de Margarita Barrientos, nos llenó de gozo nuestro interior”.

Palabras sencillas que se envuelven, experimentan y convierten en realidad, todo lo que aprendemos en nuestro  Decálogo. Lo que en forma inmediata merece además un agradecimiento especial a la Escuela de GNA, Don Martín Miguel de Güemes.

Así lo expresaban los cadetes y coordinadores que participaron del proyecto, “gracias por todo el respaldo, motivación, colaboración y por los permisos, gracias por permitirnos vivir una experiencia enriquecedora, tan especial para el alma, donde es mucho más lo que recibimos que lo que brindamos, es hermoso volver a sentirnos Niños celebrando de la mano de tantos niños, del barrio Los Piletones”. –