CABA | El Obispo Castrense de Argentina realizó visita Pastoral al HMC, Cirujano Mayor Dr. Cosme Argerich, fue en la mañana del miércoles 15 de septiembre, cuando acompañado por el Capellán Mayor del Ejército, Padre Eduardo Castellanos ingresaban al nosocomio cito en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y eran recibidos por sus autoridades. Fueron recibidos por el Director General, General de Brigada, Sergio Maldonado, el Director Operativo, Coronel Mayor Ariel Guzmán, la Directora Médica, Coronel Mayor Médico Susana Beatriz Pastor Arguello y los Capellanes Castrenses, Padre José Lepore y el Padre Patricio Walker.

Tras los saludos cordiales, Mons. Santiago Olivera, invitado por el Gral. de Brigada, Maldonado se dirigieron hasta su despacho, donde este último le contó sobre la historia de nuestro Hospital Militar Central, centralizando en su última parte de exposición en toda la tarea actual y los proyectos que se plantean a futuro como Director General. Es de destacar que participaron de este encuentro también, el Sr. Director Operativo, Coronel Guzmán y la Sra. Directora Médica, Coronel Mayor Médico, Pastor Arguello, quienes también compartieron su experiencia al frente de sus respectivas áreas.

Seguidamente, Mons. Santiago se trasladó hasta el Auditorio del HMC, donde lo aguardaban los Jefes de cada uno de los Departamentos, allí, pudo exponer sobre nuestra Diócesis Castrense de Argentina. Explicando la especial característica que posee nuestra Diócesis peculiar, personal, donde además pudo dialogar y responder consultas de nuestros hermanos castrenses.

En aquella exposición, Mons. Olivera a la luz del texto Evangelio <<estuve enfermo y me visitaste>>, compartía, “(…) la atención en el mundo de la medicina y de los más necesitados cómo son los enfermos, citando la salud, descubriendo la cercanía de los médicos fue motivo para agradecer su trabajo. En especial en este último tiempo de pandemia, para reconocer la presencia verdadera de Jesús en el enfermo.

Porque el mismo Jesús dice, <<estuve enfermo>>, no, si visitaste al enfermo, es como si yo estaba presente, sino realmente, eso se identifica con el enfermo. Por lo tanto, resulta muy importante la actitud, la atención, la mirada a los ojos, la ayuda espiritual que significa atender a los enfermos”.

Agregando, “así que, esta tremenda pandemia, está furiosa tormenta que, al decir del Papa Francisco, ustedes estuvieron presente, así también con vocación militar, preparados a dar la vida por el bien de los hermanos. Esto significó una experiencia de orgullo de saber los hombres y mujeres de este Hospital Militar Central que tiene tantos dones y tanta disponibilidad, como así también numerosos voluntarios para las distintas pruebas y vacunas que son realizados para conseguir justamente una sanidad de nuestro pueblo y nuestra argentina”.

Tras las palabras de Mons. Santiago, surgieron una serie de consultas, entre ellas subrayamos aquella donde el personal de salud preguntaba, cómo dar testimonio para descubrir la presencia de Dios en ámbito de trabajo. Allí el Obispo Castrense de Argentina, les decía, “el testimonio cristiano, la fuerza del testimonio en definitiva la vida cristiana es martirio.

Ser mártir es ser testigo, cuando recibimos el Sacramento de la Confirmación le pedimos al Señor que nos haga testigos valientes del evangelio”.

Continuando, agregó, “ser cristiano y vivir las exigencias del cristiano exige el testimonio, en esto cobra también vigencia o actualidad nuestra propia vocación militar, que es entregar la vida, estar dispuesto a ofrendarla. Así como somos soldados, somos soldados de Cristo y por lo tanto atraeremos a los hombres y mujeres de nuestro tiempo al Evangelio y demás con una coherencia entre la palabra y los hechos la vida”.

Finalmente, Mons. Santiago nos ilustraba, “cuando hay disociación de palabras y obras vamos por mal rumbo y realmente la vida cristiana nos invita y así fue la vida de los santos a predicar el Evangelio y anunciarlo con nuestra propia vida. Nuestra vida, puede suscitar los interrogantes en los otros, en los que no creen, por qué vivimos de tal modo, por qué nos conducimos por estos valores; justamente porque nos hemos encontrado con Jesús y vivimos de acuerdo con lo que se nos va pidiendo y a su Evangelio”.

Luego, en su recorrida por el Hospital Militar Central, el Obispo pudo visitar varios sectores del mismo y también los avances de reconstrucción de sector de Farmacia. Continuando, Mons. Olivera se trasladó hasta el noveno piso del edificio, donde habitan las Hnas. Pobres de San José, allí, fue recibido por la Superiora, visitó la Capilla y rezó con ellas.

Seguidamente, el Obispo Castrense de Argentina se trasladó hasta la UTI (Unidad de Terapia Intensiva), donde era aguardado por el personal médico y de enfermería, con quienes pudo encontrarse, saludarlos y agradecer su tan valiosa misión. También allí, con los protocolos correspondientes del caso y acompañado por personal médico, pudo acercarse y estar junto algunos de nuestros hermanos que se encuentran internados en ese sector.

Tal como lo hizo en esta unidad, Mons. Santiago hizo lo propio en otros dos pisos de internación, donde pudo estar muy cerca de quienes, autorizados por su médico, se encuentran cumpliendo distintos tratamientos médicos. Fue un momento muy especial para todos, pues recibían la visita de nuestro Padre y Pastor, quien pudo acompañarlos y rezar con ellos.-