SANTA FE | Tenemos que valorar el don de la vida, trabajar por ella, así lo señaló el Obispo Castrense de Argentina, Mons. Santiago Olivera en dialogo con nuestra redacción refiriéndose a su visita pastoral a las Fuerzas Armadas y las Fuerzas Federales de Seguridad presentes en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe. Luego de haber concluido el 32° Encuentro del Clero Castrense, Mons. Santiago, en la tarde del sábado iniciaba su viaje al sur de la provincia santafesina.

En la mañana del domingo 5 de mayo, Mons. Olivera junto al Capellán Mayor de GNA, Padre Jorge Massut iniciaba su visita a los efectivos de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) acompañados por el Capellán, Padre Javier Perello. Inicialmente visitó los Escuadrones 1 y 3 de GNA y la Agrupación de Despliegue Rápido Martín Miguel de Güemes, compartiendo con los efectivos, escuchándolos, rezando con ellos y bendiciendo sus vidas.

En esta primera jornada, por noche en la Iglesia del Buen Pastor, en la ciudad de Rosario, el Obispo Castrense de Argentina, en el marco de la Novena en honor a nuestra Santa Patrona de Argentina, de la Diócesis Castrense de Argentina y de la GNA, Ntra. Sra. de Luján presidió la Santa Misa, concelebraron, Capellanes de las Fuerzas Armadas y las Fuerzas Federales de Seguridad. Asistieron, integrantes de las Fuerzas presentes en la ciudad de Rosario.

Al ser consultado sobre su viaje a Rosario, Mons. Santiago nos decía, “nuestra visita a la región es un signo de contener y sostener a nuestros fieles que entregan su vida en su misión. Ellos están al servicio de este gran despliegue y operativo en la ciudad de Rosario, en tal sentido, queremos también agradecer en nombre de la Iglesia Castrense por sus vidas que siempre es un riesgo y particularmente en estos tiempos y en esta tarea.

Nuestra presencia también es ser cercanos en lo concreto, es decir, poder transmitirles que no solo nosotros rezamos y estamos cerca de nuestros fieles. Lo estamos en el día a día por cada Capellán, pero como Iglesia Diocesana, Obispo, Capellán Mayor, visitarlos es un gesto de proximidad de solidaridad hacia los hombres y mujeres de las Fuerzas, hacia sus familias, hacia la Iglesia Diocesana territorial, en este caso el Arzobispado de Rosario junto a su Arzobispo”.

Profundizando, el Obispo compartía, “visitar Rosario, es estar aquí, en comunión con toda la Patria porque todos somos Rosario y todos nos implicamos y acompañamos esta realidad. Lo hacemos predicando con nuestra presencia y también la boca, diciendo que la violencia nunca es la alternativa a seguir, que el respeto a la vida y la valoración de ella es el camino de la fe que se plasma.

Tenemos que valorar el don de la vida, trabajar por ella; debemos ayudar a las generaciones jóvenes a no dejarse corromper. Lo hacemos sabiendo que el modo de amar de Dios es un amor gratuito, un amor que no permite el amor al dinero, el amor a la violencia, el amor a la ambición sino un amor desinteresado y entregado”.

Concluyendo Mons. Olivera señaló, “(…) nos da mucha alegría estar en un lugar que es un centro de recuperación para las adicciones, el tema de las Adicciones es sin decir, sin hablar, observando como la Iglesia está presente en este mundo, previniendo. Sabiendo que nuestros hombres y mujeres de las Fuerzas luchan contra el delito organizado, donde no hay valoración de la vida, ni respeto a la dignidad humana, viendo todo esto, como Iglesia Diocesana queremos estar acompañando a nuestros fieles, a nuestra sociedad”.-