Puerto Belgrano | El Obispo Castrense de Argentina tomó Juramento de Fidelidad al nuevo Capellán de la ESSA

26 noviembre, 2021

Puerto Belgrano | El Obispo Castrense de Argentina tomó Juramento de Fidelidad al nuevo Capellán de la ESSA (Escuela de Suboficiales de la Armada), el Padre Darío Verón, fue en la mañana del jueves 25 de noviembre, durante la celebración Eucarística. En el tramo final de la visita Pastoral a Puerto Belgrano, en la provincia de Buenos Aires de Mons. Santiago Olivera, visitó la ESSA, acompañado por el Vicario General, Mons. Gustavo Acuña y el Canciller y Capellán Mayor de la Armada Argentina, Padre Francisco Rostom Maderna.  

Presidió la Santa Misa, Mons. Olivera, Obispo Castrense de Argentina, concelebraron, el Vicario General, el Canciller y Capellán Mayor de la Armada Argentina, el Vicerrector del Seminario Diocesano, Padre Diego Pereyra. También, los Capellanes, Padre Diego Kessler, Padre Pablo Caballero Karanik, Padre Santiago García del Hoyo y el Padre, Darío Joaquín Verón, participaron, el Director Escuela de Suboficiales de la Armada, Capitán de Navío, Alberto Philippi, efectivos y aspirantes de la Fuerza Armada.

En la Homilía compartida por el Obispo, señaló, “dar gracias es profundamente Evangélico. Jesús frente a los diez enfermos de lepra que fueron curados, pregunta por los otros nueve, ya que solo uno vino a darle gracias”.

Agregando, continuó Mons. Santiago, “hoy queremos darle gracias a Dios por tantos dones, aún por situaciones difíciles que nos ayudan a crecer. Damos gracias por el servicio del Padre Diego Kessler que seguirá con nosotros y por el nuevo Capellán, padre Darío”.

En el final de la celebración Eucarística, el Padre Darío Verón, dio gracias a Dios y al Obispo que le confía está Misión. Expresando, “vengo contento y totalmente disponible para servirles, acompañarlos y a compartir la vida”.

Seguidamente, el Director de la ESSA, Capitán de Navío, Philippi, hizo público el agradecimiento al Obispo Castrense de Argentina, por honrar su compromiso asumido. Recordando, que, en su visita Pastoral en agosto, “le pedimos un capellán y nos escuchó, lo agradecemos”; agregando, además, “(…y Padre Darío, desde hoy, te sumamos al equipo”.

A continuación, compartimos el Juramento de Fidelidad del Padre Verón:

Yo, Pbro. Darío Joaquín Verón, al asumir el oficio de Capellán de la ESSA de la Armada, prometo mantenerme siempre en comunión con la Iglesia Católica, tanto en lo que exprese de palabra, como en mi manera de obrar. Soy plenamente consciente de que mi consagración a Dios y servicio a los demás conlleven que el ejercicio de mi ministerio en cumplimiento del deber, implique -a ejemplo de Jesús- dar la vida.

Cumpliré con gran diligencia y fidelidad las obligaciones a las que estoy comprometido con la Iglesia universal como particular, en la que he sido llamado a ejercer mi servicio, ayudando a los fieles a mi confiados a identificar aquellos elementos que puedan llegar a ser un puente y una plataforma para el encuentro con Cristo Príncipe de la paz y con todos, destacando particularmente el valor de la vida, el valor de la persona y el valor de la paz, a fin de que puedan vivir en plenitud la vocación bautismal y su pertenencia eclesial, según lo establecido por el Derecho.

En ejercicio del ministerio que me ha sido confiado en nombre de la Iglesia, conservaré íntegro el depósito de la fe y lo transmitiré y explicaré fielmente, evitando, por tanto, cualquier doctrina que le sea contraria para que nuestro «Servicio de paz entre las armas» sea un «nuevo anuncio del Evangelio en el mundo militar y policial, del que los militares y policías cristianos y sus comunidades no puedan por menos de ser los primeros heraldos».

Seguiré y promoveré la disciplina común a toda la Iglesia y observaré todas las leyes eclesiásticas, ante todo aquellas contenidas en el Código de Derecho Canónico.

Con obediencia cristiana acataré lo que enseñen los sagrados Pastores, como doctores y maestros auténticos de la fe, y lo que establezcan como guías de la Iglesia, para que pueda ser de veras el amor que une a las gentes de este mundo, su corazón, su voz que adora y ruega, que goza y que llora, su expiación y su mensajero de esperanza y ayudaré fielmente a los Obispos diocesanos, para que la acción apostólica que he de ejercer en nombre y por mandato de la Iglesia, se realice siempre en comunión con ella.

Que así Dios me ayude y estos Santos Evangelios que toco con mis manos.

En la Escuela de Suboficiales de la Armada, en Puerto Belgrano, a los 25 días del mes de noviembre del año del Señor 2021.

Pbro. Darío Joaquín Verón

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