Buenos Aires | Debemos estar preparados y también dispuestos como los Soldados a entregar la vida por la causa del Evangelio, las palabras fueron compartidas por el Mons. Santiago Olivera, Obispo Castrense de Argentina tras finalizar la celebración de los Sacramentos de Bautismo, Primera Comunión y Confirmación. Fue en la media mañana del jueves 3 de junio, en el predio del VIVAC, emplazado en la Dirección de Arsenales del Ejército Argentino, en Boulogne Sur Mer, provincia de Buenos Aires, donde se encuentran los integrantes del NIB (Núcleo de Instrucción Básica).

Es importante señalar, que los jóvenes postulantes, quienes están a punto de egresar como Soldados, fueron entrenados durante más de dos meses, en el NIB. En la capacitación castrense, los jóvenes fueron preparados para asumir el servicio que la Fuerza les asigne.

En esa instancia, el Director de la Dirección Arsenales, convocaba al Capellán Mayor del Ejército, Padre Eduardo Castellanos, a brindar la instrucción catequética a los postulantes, tal como lo había realizado en el NIBA (Núcleo de Instrucción Básica Administrativa) en la Dirección de Bienestar en el Regimiento Patricios. De esta manera, de los encuentros semanales del Capellán Mayor del Ejército, quien estuvo acompañado por el Capellán, Padre César Barroso, fruto de ello, surgió un profundo interés de los jóvenes y se preguntó quién quería recibir los Sacramentos.

Presidió la Santa Misa, en Altar de Campaña, Mons. Santiago Olivera, Obispo Castrense de Argentina, concelebraron el Capellán Mayor del Ejército, Padre Castellanos y el Capellán, Padre Barroso. Es importante destacar, que la ceremonia se realizaba con distanciamiento social y respetando cada una de las normativas de bioseguridad por estar en pandemia, con la asistencia de los postulantes, instructores y autoridades del NIB del Ejército Argentino.

De esta forma, Mons. Santiago celebró Sacramento de Confirmación, de los cuales 8 recibieron además su Primera Comunión y 4 de ellos, fueron Bautizados, además de recibir también su Primera Comunión. Al respecto, Mons. Olivera, nos decía, “ha sido un día muy gozoso, un pequeño grupo, pero al estilo de la formación militar y al aire libre he tenido la alegría de confirmar, de dar la comunión y de bautizar a jóvenes Soldados”.

Continuando, agregaba, “es una alegría muy grande, porque es la concreción de mi Ministerio. Ejercer el Ministerio Episcopal en medio de nuestro pueblo y al servicio nuestro pueblo, nos renueva sin duda en nuestro deseo de servirlos. Reseñando, podemos decir, que un confirmado es un Soldado de Cristo, porque estamos listos para ser valientes testigos del Evangelio.

Demostrándolo en nuestra realidad, en el trabajo, en nuestra en nuestra Fuerza, en este caso del Ejército Argentino y lo que implica ser soldado que ustedes -les decía a los jóvenes- saben bien qué ha significado este esfuerzo. Les ha demandado estar bien físicamente, les exigió probarse y estar dispuestos a todo, aún prepararse parapara entregar la vida.

Así también nuestra vida cristiana, exige esfuerzo dedicación. Como un atleta, debemos estar preparados y también dispuestos como los Soldados a entregar la vida por la causa del Evangelio”, finalizaba el Obispo Castrense de Argentina.-