MONS. OLIVERA | En nombre de la Iglesia diocesana, queremos agradecer sinceramente a los miembros de las Fuerzas, la seguridad de nuestra oración, el compromiso y el deseo de nuestra cercanía de siempre, así lo manifestó el Obispo Castrense y de las Fuerzas Federales de Seguridad de Argentina mediante un escrito dirigido a los Sres. Ministros de Defensa, Seguridad de la Nación y a los Sres. Jefes de las Fuerzas Armadas y Fuerzas Federales de Seguridad.

En su mensaje, Mons. Santiago Olivera destaca, “sabemos de su entrega y de su amor a la patria, su entrega que es hasta dar la vida, pero la nación también tiene nombre, historia, situaciones, y en los momentos de serias dificultades, de emergencia, de catástrofes, de situaciones bien difíciles en nuestro país, allí los hombres y mujeres de nuestras fuerzas, están para expresar, solidarizarse y ponerse al servicio”. Completando, dijo, “queríamos mandarles un fuerte abrazo, la seguridad de nuestra oración, el compromiso y el deseo de nuestra cercanía de siempre, y no queremos dejar de agradecer porque no solo la gratitud sabemos que es un reconocimiento de buenas personas, sino también profundamente evangélico, reconocer con hondura lo que los otros realizan en nombre de tantos”.

A continuación, compartimos en forma completa el mensaje de Mons. Santiago Olivera, Obispo Castrense y de las Fuerzas Federales de Seguridad:

Buenos Aires, 8 de marzo de 2025

Prot. 20/25

Señor Ministro de Defensa

Señora Ministra de Seguridad de la Nación

Señores Jefes de las Fuerzas Armadas y Fuerzas Federales de Seguridad

En nombre de la iglesia diocesana, en nombre de cada uno de los capellanes, y en nombre de todos, queremos agradecer sinceramente a los miembros, hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas Argentinas y las Fuerzas Federales de Seguridad.

Sabemos de su entrega y de su amor a la patria, su entrega que es hasta dar la vida, pero la nación también tiene nombre, historia, situaciones, y en los momentos de serias dificultades, de emergencia, de catástrofes, de situaciones bien difíciles en nuestro país, allí los hombres y mujeres de nuestras fuerzas, están para expresar, solidarizarse y ponerse al servicio.

No podemos dejar de, con admiración y gratitud, manifestarles todo lo que para nosotros significan que hombres y mujeres que se nos confían para el cuidado espiritual estén así al servicio de nuestros hermanos que están sufriendo más las consecuencias climáticas y adversas hoy en Bahía Blanca.

Queríamos mandarles un fuerte abrazo, la seguridad de nuestra oración, el compromiso y el deseo de nuestra cercanía de siempre, y no queremos dejar de agradecer porque no solo la gratitud sabemos que es un reconocimiento de buenas personas, sino también profundamente evangélico, reconocer con hondura lo que los otros realizan en nombre de tantos.

Les envío mi Bendición y confiamos, a quienes están sirviendo y los damnificados, a la intercesión de Nuestra Señora de Luján Patrona de Nuestra Patria.

+Santiago Olivera

Obispo Castrense

y de las Fuerzas Federales de Seguridad

República Argentina